Lunes 04 de mayo de 2015
¿Quién es? ¡Gaudiano del PRD!, ¿Quién va? ¡Gaudiano, el que
triunfará!
“Soy gente de bien, no tengo
nada que esconder”, respondió a la prensa -la mañana de este lunes- el candidato
del Partido de la Revolución Democrática (PRD) a la alcaldía de Centro, Gerardo
Gaudiano Rovirosa, con el semblante jovial, marcado por la herencia genética de
cejas caídas y labios delgados.
Pasadas las once horas, Gaudiano Rovirosa presentó, en su
tercera conferencia de prensa de inicio de semana, los detalles del Primer Eje
Rector de lo que será su gobierno municipal, desarrollo institucional para un
gobierno eficiente.
La administración municipal será por resultados, cada seis
meses habrá una evaluación y aquien no cumpla metas será removido del cargo
destacó, teniendo a su lado a Casilda Ruiz Agustín, quien lo acompañó por
tercera ocasión.
En una de las salas de trabajo de la segunda planta de la
sede estatal perredista, el contendiente por la alcaldía de Centro dijo que su
planilla de regidores permanece intacta.
Es la misma -subrayó-. No hubo ningún cambio, se ha cumplido
con la paridad de género. Sin prisa, también respondió que haberse frenado la
campaña cinco días afectó a todos los partidos y que urge que el órgano
electoral difunda los pormenores de la legislación electoral que tiene
confundida a los diferentes sectores de la población, incluido al de los
empresarios.
A las doce horas con treinta minutos, el candidato del PRD
llegó a la esquina de la calle Laguna de Mecoacán de la colonia La Manga III.
-Está en su casa –lo recibieron Bernardino Hernández Chablé y Maribel Pérez
Jiménez, dirigentes solaztequistas de la colonia.
De sombrero, con la tez curtida que da cuenta de más de
sesenta años de vida, don Bernardino recordó que es fundador del Partido de la
Revolución Democrática.--Mi partido, aquí, está fuerte y más, con Gaudiano como
presidente –sonrió.
A tres cuadras de la comitiva se miró a don Antonio que
estaba pendiente en la azotea de su vivienda. Los promotores del voto pasaron
por la reja de su casa y él como si nada. Permanecía con la vista en el
candidato que saludaba de casa en casa.
Faltando veinticinco metros, don Antonio, cincuentañero,
bajó las escaleras y abrió la reja. Tiempo suficiente para recibir a Gerardo
Gaudiano. -¡Que triunfe! –le dijo al revisar el folleto con las propuestas.
A las 13 horas con 20 minutos la caminata de proselitismo
terminó esa calle, llegando al camellón dobló para continuar en la calle Laguna
del Rosario, con la porra juvenil, a ritmo de la batucada se escuchaba:--¿Quién
es? ¿Quién es? ¡Gaudiano del PRD! ¿Quién va?
¿Quién va? ¡Gaudiano, el que triunfará!
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