Gerardo Gaudiano es el político que esperaba conocer, es diferente, es
joven, tiene ideas con las que estoy de acuerdo. De él he aprendido y me ha incentivado a que
debo trascender en la vida. Quien se expresa así es un joven universitario que de pronto se vio
inmerso en la vorágine de una campaña. Llegó prácticamente solo, uno de sus amigos lo acompañó después, a los recorridos de campaña casa por casa, se
trata del estudiante de leyes Juan David Izquierdo Ascencio.
Lo mismo se le ve en el contingente coreando
las porras, animando, repartiendo propaganda, poniendo lonas o como ahora,
corriendo para ayudar en lo que se necesite. Este joven es un todo terreno de
los brigadistas.
Por fuera ya dio sus primeros pasos como
gestor y ese camino lo llevó
a buscar al entonces diputado federal Gerardo Gaudiano. Ser gestor es
una actividad que le agrada, ayudar a la gente a conseguir lo necesario para satisfacer
una necesidad apremiante. Ahí
comenzó
a conocer al hoy candidato a la presidencia municipal de Centro. La
gestoría lo condujo directo a su Casa de Gestión y cuando lo trató por primera vez hubo
conectividad porque ambos hacen lo mismo: buscan un mejor municipio de Centro
para todos.
Sin militar en ningún partido
político, Juan David ve a la persona –Gerardo Gaudiano-, lo considera un político honesto, representante de los jóvenes que hoy se labran su futuro. Asoleado
y realmente sudando la camiseta el estudiante de leyes confiesa que tuvo que
darse de baja temporalmente para estar de tiempo completo en la campaña. Llegó el momento en que la tarde ya no era suficiente para
apoyar, creyó
entonces que tenía que darse de tiempo
completo y así
lo hizo.
Conoce la historia de Gerardo y recuerda que
él comenzó igual, colocando propaganda, acompañando a candidatos de
su partido. Esta es otra escuela, la de la praxis política, la efectiva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario